La Empresa Municipal de Transporte Urbano (EMTUSA) ampliará las frecuencias de todas aquellas líneas de autobús que lo precisen para evitar aglomeraciones en el interior de los vehículos. Para ello, lleva a cabo estudios diarios del uso de las líneas que permiten «ajustar los refuerzos a la demanda en cada momento», explicó ayer el gerente de EMTUSA, Juan José Piniella. Según los datos de los últimos días, «los autobuses no van llenos», aseguró. Desde el día 28 de septiembre, «todas las líneas están funcionando. En hora punta hay 74 autobuses en la calle, el mismo número de vehículos y de frecuencias que en octubre de 2019», precisó. La diferencia respecto al año pasado es que «con el mismo nivel de servicio, la demanda ha bajado un 35%». Un pronunciado descenso que Pinilla atribuyó «al teletrabajo en muchas empresas, las clases semipresenciales y a una menor vida social».
Adaptación de líneas
Este curso, los horarios de los centros educativos se han modificado. Para adaptarse a los cambios, las líneas 1, 10, 12 y 15 tienen una frecuencia de entre 8 y 10 minutos. Y otras como la 2 o la 18, se refuerzan con un autobús adicional hacia la mitad del recorrido.
Piniella insistió ayer en que los autobuses «son espacios seguros» frente a la covid. «El uso de la mascarilla es obligatorio, están bien ventilados y se higienizan cada día», enumeró. También comentó que las incidencias relacionadas por la utilización de la mascarilla, que han requerido la intervención de la Policía Local, «han sido mínimas, apenas dos». Sin embargo, aumentan las quejas por usuarios que una vez dentro de los autobuses se quitan la mascarilla. Este es un problema que «solo se puede abordar con concienciación», señaló.
Para intentar atajarlo, anunció que se llevará a cabo «una campaña informativa y se aumentarán las inspecciones aleatorias para concienciar sobre la obligatoriedad de uso en todo momento».