El Ayuntamiento tomará los datos personales de los asistentes a los espectáculos para localizarles en caso de que haya un positivo
Los patios y pistas deportivas de varios colegios de la ciudad servirán de escenario para parte de la programación del verano que prepara el área de Festejos de Divertia, que sigue a la espera del visto bueno de las autoridades sanitarias a una propuesta basada en la dispersión de los espectáculos a lo largo de la ciudad para evitar concentraciones masivas de público.
El proyecto presentado al Principado contempla dos tipos de escenarios: tarimas en distintos puntos de Gijón para actuaciones musicales de pequeño formato -similares a las que se suelen instalar para el programa de Arte en la Calle- y las mencionadas instalaciones escolares para actividades orientadas mayoritariamente al público infantil, como teatro y circo, pero también para proyecciones de cine al aire libre -se plantea un ciclo centrado en los años 80- y sin descartar tampoco conciertos en ellos.
Varios conciertos a la vez
Este control de accesos es fácil de poner en marcha en recintos acotados como los colegios -entre ellos estará el Honesto Batalón de Cimavilla- y en varios de los emplazamientos elegidos para la instalación de tarimas, como el Jardín Botánico Atlántico, el Tendayu del Pueblo de Asturias, la plaza de toros -los días que no haya actividades de Metrópoli- y uno de los espigones de Fomento. Hay otros espacios que aún generan dudas por la capacidad para acotar el acceso a los mismos. Lo que sí está también decidido es que los conciertos que se programen en un mismo día darán comienzo a la misma hora, para fomentar que el público se reparta por los distintos escenarios.
Por otra parte, el consejo de administración de Divertia dio ayer su visto bueno a la programación de julio, agosto y septiembre del Teatro Jovellanos. Reabrirá sus puertas el 17 de julio, con su aforo reducido a 200 personas, casi una sexta parte de su capacidad.