El Comercio, 19 de junio de 2020
La alcaldesa promete atender las peticiones del barrio más allá de la construcción del colegio y el consultorio
Nuevo Roces cumple una década de vida y, a esa edad, como dijo la alcaldesa, Ana González, «ya se pueden tener muchas cosas». Ayer, empezaron por una más bien simbólica, pero necesaria para acabar con los problemas de movilidad para comunicarse con el barrio de Contrueces: una pasarela.
Esta plataforma, que los vecinos esperaban desde 2016, año en el que se planteó, supone «romper con el aislamiento de este barrio», señaló la regidora. Ella, junto a varios niños de la zona, rompió la cinta para abrir el paso a este puente que cruza sobre la autovía del Cantábrico.
González respondió que asume dichas peticiones ya que, dijo, «esta zona tiene que tener todo lo suficiente para vivir bien». «No solo esos dos servicios, sino también muchos otros necesarios», ahondó sobre sus planes para Nuevo Roces.
Y, como símbolo de esa lucha del barrio, Miguel Bernardo entregó una camiseta a la alcaldesa en la que rezaba: ‘Nuevo Roces también es Gijón’. También acudieron al acto los concejales Dolores Patón y Olmo Ron.