- Ramón Tuero (PSOE): “Es evidente que al peso pesado del Gobierno de Moriyón se le atragantan obras, grandes y pequeñas, desde el inicio del mandato”
- Los socialistas consideran el edil forista Gilberto Villoria debe dejar de culpar a terceros de sus fallos y asumir sus propios errores para poder avanzar
El concejal socialista Ramón Tuero ha criticado duramente la gestión del concejal delegado de Infraestructuras Urbanas y Rurales, Gilberto Villoria, del que asegura que “se le atragantan las obras desde el inicio de mandato” en junio de 2023. “El peso pesado político de la alcaldesa, el señor Villoria, no logra dar con la tecla de las reformas en Gijón/Xixón”, asegura.
En palabras del edil del PSOE, la concejalía del forista acumula problemas con un patrón en común: las excusas y disculpas de su responsable: “se queja. el señor Villoria, de que la mayoría de estos proyectos son heredados del gobierno anterior y que estaban mal realizados, lo que no explica es que el 90% de los mismos ha dependido de su supervisión, ejecución y finalización”, argumenta el socialista. “No vale echar la culpa a los demás. Hay que ser valientes y asumir la responsabilidad que tiene cada uno”, añadió.
Los socialistas consideran que es imposible trabajar siempre con la misma empresa y con los mismos trabajadores que se trasladan de una obra a otra, acumulando retrasos. “El lema del Gobierno, “hacer más con menos”, no es posible y lo estamos viendo con el señor Villoria que es un trilero que echa la culpa a terceros de sus errores”, dice Ramón Tuero aludiendo al momento en que culpó del hundimiento de Pablo Iglesias a los autobuses eléctricos que no circulaban por ella o a Tráfico y Movilidad por las obras del Camino de Santiago que no coordinaron. “Instamos al señor Villoria a asumir sus errores para poder cambiar su forma de trabajar para que no se acumulen quejas ciudadanas debido a las obras y para tener la ciudad que merecemos”, explicó.
Para el socialista, todo comenzó con la Avenida Pablo Iglesias, que se ejecutó prácticamente en su totalidad bajo su tutela y que a día de hoy no deja de acumular quejas vecinales, pero también en otros menores. “Nuestras calles acumulan decenas de baches que sufrimos todos y todas los que circulamos por ellas, especialmente en motos y bicicletas”, explicó.
A esto se unen el aparcamiento de apeadero del tren de La Calzada, cuyo firme vuelve a estar levantado, por tercera vez, o las obras del Camino de Santiago en el Oeste, en Veriña y en Montiana. Según Tuero, se ha tirado “más de medio millón de euros a la basura porque son pocos los/as peregrinos/as que se usan esta ruta alternativa y que constituye un peligro para vehículos, autobuses y tractores de la zona debido a la reducción de sus carriles de circulación”.
En la actualidad, las quejas se centran en las obras de mejora de la accesibilidad de las aceras de la Avenida Schulz y que nuevamente parecen eternizarse. “El edil echa balones fuera culpando al encarecimiento de materiales por los retrasos y por tener que realizarla en fases”, relata Tuero que añade, “el señor Villoria, por muy desconcertado que se muestre, no se da cuenta de las molestias e inconvenientes que suponen para personas con movilidad reducida o carritos de bebé”.