- Monchu García cree que la cortesía institucional no debe confundirse con sumisión
- Considera decepcionante la actitud de la alcaldesa que “sí plantaba un túnel en la playa de San Lorenzo para contentar a los vecinos del centro, pero les niega el pan y la sal a los de los barrios del oeste”
- “Las inversiones comprometidas en Gijón no pueden estar supeditadas a algo que también es un compromiso: sacar los camiones de la zona urbana”, afirma el secretario general
“Nosotros decimos no”. Así de contundente ha sido el secretario general del PSOE gijonés este mediodía en relación con el cambio en el proyecto del vial de Jove que presentó ayer el Ministerio de Transportes en presencia de la alcaldesa Carmen Moriyón y el consejero Alejandro Calvo. Monchu García considera inaceptable la propuesta de un vial en superficie por el barrio.
“Nos sentimos frustrados, decepcionados y profundamente enfadados. Es el sentir de las vecinas y vecinos de la zona oeste. No es de recibo que 30 años después se ponga encima de la mesa una solución que ya se descartó. No se puede plantear sacar los camiones de Cuatro Caminos, llevarlos al alto del Cerillero y devolver el tráfico pesado a 400 metros de Cuatro Caminos, en la Casa del Mar, es implantable”, afirma.
Los socialistas muestran su posición unánime; la ejecutiva de la agrupación local y el Grupo Municipal Socialista tachan la situación de inadmisible.
“Tenemos en la memoria manifestaciones de los años 90 donde ya se descartaba esta posibilidad que ahora viene envuelta en ‘regalos’ que no son más que compromisos que ya estaban adquiridos”, añade el secretario general.
En ese sentido, critica la comodidad que ha mostrado la alcaldesa Carmen Moriyón cuando le plantean unos problemas técnicos que ha aceptado dócilmente. Considera que su actitud es intolerable, viniendo de una regidora que “sí plantaba un túnel en la playa de San Lorenzo para contentar a los vecinos del centro, pero les niega el pan y la sal a los de los barrios del oeste”.
Para García, esta actitud va ligada a los supuestos anuncios de nuevas inversiones para Gijón que no son más que compromisos ya adquiridos y, por ello, con los números sobre la mesa, la alcaldesa pretende sacrificar a una parte de la ciudad para mejorar otra. “El viaducto de Carlos Marx hay que tirarlo, no depende de reducir la inversión en el vial de Jove; la estación intermodal tiene que avanzar, no depende de esto, el desdoble de la GJ10 tiene que avanzar y tampoco depende de esto. Las inversiones comprometidas en Gijón no pueden estar supeditadas a algo que también es un compromiso: sacar los camiones de la zona urbana. Si hay que hacer un parque en el ‘solarón’ porque se puede liberar dinero, habrá que hacerlo, no será ese el problema, pero no a costa de que los vecinos del oeste tengan que seguir tragando la contaminación que llevan tragando 50 años. No es ese el camino. Es como si decimos que no arreglamos una carretera en Somió y a cambio adoquinamos la calle Uría”, añade.
Desde el PSOE gijonés recuerdan que el último fin de la política es defender los intereses de la ciudadanía, sin confundir cortesía institucional con sumisión. “La necesidad de esta zona es una ciudad de ciudad, histórica y ya no puede esperar más. Cuando pensábamos que esto estaba resuelto, volver 30 años atrás al mismo punto de partida es desesperante e inadmisible. ¿Plantear que se haga una M30, la mentira de 30 años? No, por ahí no” concluye el Monchu García.
Precisamente en relación con las declaraciones esta mañana de la alcaldesa, el secretario general asegura que frente a la opinión de los técnicos que ayer dijeron que había riesgo para las viviendas, está la opinión de otros técnicos igualmente cualificados (y en algunos casos miembros de los mismos equipos) que llevan sosteniendo décadas la viabilidad del proyecto. “La alcaldesa debe dejar de hacer su política de escaparate, sonreír ayer en el Ministerio y ponerse hoy delante de una pancarta. Debe pelear por defender los intereses de los vecinos, que para eso es para lo que le pagan un sueldo como alcaldesa, no para asentir, callar y echarle la culpa a otros”, sentencia.